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Panorama macroeconómico del Reino Unido - Resistencia a principios de 2024 con perspectivas mixtas en el futuro
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La economía británica se mostró resistente a principios de 2024, con un crecimiento del PIB del 0,6% en el primer trimestre, tras las contracciones de los dos trimestres anteriores. El PIB per cápita aumentó un 0,4%, lo que supone la primera subida en dos años. Sin embargo, el Banco de Inglaterra prevé un crecimiento moderado de sólo el 0,2% para el segundo trimestre.
La inflación bajó al 3,2% en marzo, y el Banco de Inglaterra espera que se acerque pronto a su objetivo del 2%. Sin embargo, la inflación podría subir al 2,5% en el segundo semestre debido a los ajustes de los precios de la energía.
El mercado laboral también presenta un panorama desigual. El desempleo subió ligeramente al 4,3% en marzo, y el descenso de 22 meses de las ofertas de empleo sugiere una posible relajación. Sin embargo, los economistas se muestran preocupados por la exactitud de los datos sobre ofertas de empleo, ya que el bajo coste de la publicidad en línea puede inflar las cifras, lo que significa que el descenso de las ofertas de empleo puede ser incluso peor de lo que indican los datos. A pesar de esta relajación del mercado laboral, los salarios resistieron, ya que los salarios medios aumentaron en términos reales un 2,1%, incluidas las primas, y un 2,4%, excluidas las primas, incluso ante la ralentización de la inflación.
En general, aunque el modesto repunte del PIB y el aumento de los salarios son indicadores positivos, la economía británica sigue enfrentándose a un panorama incierto, con posibles vientos en contra derivados del debilitamiento del mercado laboral y de los desafíos mundiales.
